
Tienen que darse demasiadas coincidencias para que te compres la pantalla de proyección T.O.O.B (Think Out Of the Box). Los requerimientos mínimos son:
1) pirado de los videojuegos de carreras o simuladores de vuelo
2) 1.440 dólares (unos 1.000 euros) de más
3) 1×2 metros libres en tu habitación
4) un proyector
5) un amigo que se pueda embutir contigo en la media cúpula.
A todas luces, un exceso doméstico. Pero si eres de una agencia de comunicación, quizá te interese la versión para exteriores, hinchable, de 2,5×5 metros