A veces, un diseño curioso y divertido puede hacer que un producto sencillo gane muchísimo, aunque no le añada intrínsecamente ninguna funcionalidad aparente. Pues éste es el caso del genial infusor de té Mr. Tea. Bueno, realmente el diseño en forma de personajillo sí que tiene utilidad, ya que gracias a sus bracicos se sujeta al vaso, pero lo realmente genial es la calma que da y lo simpático que queda.
Bueno, eso siempre que no seas un habitante de Muspelheim haciéndose su infusión con hojas de Yggdrasil, mientras contemplas en tu sofá hecho de calaveras el Ragnarok. Eso quizás no lo aguante la silicona.
Pero referencias tangenciales mitológicas cogidas con pinzas aparte, podéis pillar a vuestro nuevo compañero de momentos de relax o constipados por Amazon, donde cuesta 10 dólares. ¿Cómo lo ves?