“frescura espumosa”
cuando todavía te queda más de la mitad? ¿Cuántas veces has increpado al camarero la ausencia o exceso de la misma cuando te la sirve? Por fin podrás ser libre del yugo espumil impuesto por el entorno y controlar tú mismo con esta jarra cuando quieras la cantidad de espuma.
Con sólo pulsar un botón, el aire pasa a la jarra creando espuma en la cerveza instantáneamente al subir. De esta forma no necesita pilas ni que tengas que ir haciendo el guarrete con una pajita soplando.
Está disponible en dos colores, amarillo y negro, para su mecanismo interno y aunque no está tan recargada como una jarra tradicional alemana; cuesta 22,50 dólares. ¿Merece la pena?