Ni es fruto del Photoshop, ni de alteraciones genéticas del Dr Moreau, ni de un exceso de petit-suisees con taurina… Este enorme gato de proporciones casi mitológicas que veis en la foto es real y natural, se llama Rupert y está destinado a ser el gato doméstico más grande del mundo cuando alcance su máximo desarrollo y llegue a unos monstruosos 14 kilos de masa peluda ronroneadora y gatetil.
Nuestro felino protagonista ha llegado a sus actuales 9 kilos con 2 años ya que es de la raza Maine Coon, una de las más grandes que existen y conocida por su trato afable, su gran adaptación a exteriores, incluso gusto por el agua, y su enorme robustez, que los convierte en una especie de Hulks gatunos pero sin ganas de destrozarlo todo.
Los veterinarios esperan que cuando tenga 3 años llegue a los 14 kilos, para que os hagáis a la idea superaría a un lince ibérico medio y probablemente podría comerte si no fuera porque le da pereza buscarse a otro dueño que le sirva poniéndole comida y cambiándole la arena.