Aún no ha terminado sus estudios en el Royal College of Art y Hannes Harm ya es capaz de crear diseños tan originales, atractivos y prácticos. Qué será de él cuando alguna empresa contrate a alguien con tanto talento. Se trata de unos altavoces que se pueden doblar de forma que varían su forma ultradelgada, fácilmente escamoteable si hay que guardarlos o en las inevitables mudanzas. Están realizados en acero inoxidable y presentan un grosor de medio milímetro.
Además el coste debería ser muy bajo debido a que estamos hablando de una lámina de acero perforada con láser. El propio soporte incluye los botones con los que poder accionar el volumen.
Tampoco sería muy costoso el envío al poder hacerse en un sobre.
Y en cuanto al altavoz en si, al emplearse uno con membrana de tipo plano, ni se abultaría el dispositivo ni el embalaje y además estéticamente no rompería la línea. ¿A qué esperan para construirlos y venderlos?