jueves, 9 de abril de 2009

Microbios que producen combustible de la electricidad y del CO2 que «comen»

Es sólo cuestión de tiempo para que los vehículos eléctricos tomen la calle. Una vez exista una red óptima de estaciones de recarga, sólo faltará que el sector automovilístico se ponga de acuerdo en el tipo de batería de recarga. Pero a la espera de que todas las firmas decidan unificar estas baterías, un equipo de científicos de la Universidad estatal de Pensilvania (Estados Unidos), dirigido por el investigador Bruce Logan, ha descubierto un nuevo método para producir biocombustible (sin los problemas de los de primera generación) a partir de la electricidad. El proceso en cuestión lo han llamado «electrometanogénesis», y consiste en producir metano a partir de un tipo de microorganismos gracias a la electricidad, el CO2 y el agua. Lógicamente la electricidad debería proceder de fuentes renovables, pues de lo contrario, este sistema -dotado con una eficiencia mayor de un 80 por ciento- no tendría mucho sentido. En el estudio, publicado en «Enviromental Science and Technology», el equipo de científicos explica que los microorganismos metanogénicos (del grupo de los anaerobios) producen metano de las marismas y los vertederos. Los investigadores pensaban convertirlo en hidrógeno. Sin embargo, mientras trataban de producir hidrógeno con el sistema de electrólisis con células microbianas, detectaron que durante el proceso se generó mucho más metano del esperado. El proceso en cuestión no captura CO2, pero logra convertirlo y por tanto neutralizarlo junto al agua en metano, algo que podría usarse en el transporte, los sistemas de calefacción y en la industria química. Logan reconoce a este semanario que el peligro estaría si el metano fuera vertido. «Entonces sí es un problema. Pero se trata de un combustible como puede ser el gas natural, salvo porque los microorganismos fijan el CO2 en el metano, por lo que el proceso de carbono es neutro», afirma Logan