miércoles, 11 de noviembre de 2009

El implante de tatuajes digitales


Digital Tattoo Interface es uno de esos conceptos chungos que te hacen preguntarte seriamente que pasa por la mente del diseñador. Sin embargo, lo veo extrañamente próximo (¿demasiada ciencia-ficción en mi vida?): una interfaz electrónica alimentada por el flujo sanguíneo que está injertada bajo la piel y simula un tatuaje, muestra vídeos o actúa como teléfono y ordenador. Lo más inquietante de todo es que en teoría convierte la glucosa y el oxígeno de la sangre en electricidad. Si lo usas demasiado, quizá te acabe secando por dentro. Lo que decía, demasiadas películas, tengo que salir más de casa. Pero no dejo de darle vueltas a los posibles usos de la interfaz. ¿Qué harías con ella?