martes, 12 de agosto de 2014

¿Por qué las secoyas viven tanto tiempo?

Los árboles más altos y longevos del mundo son las secoyas rojas, Sequoia sempervirens, impresionantes coníferas que superan los 100 metros de altura, los 7 metros de diámetro en la base y llegan a vivir de 2.000 a 3.000 años. Su hábitat se limita a una franja de 750 kilómetros de longitud por entre 8 y 75 kilómetros de anchura en la costa del Pacífico estadounidense, en los estados de California y Oregón.
 
Los ejemplares de mayor altura y edad están en el Parque Nacional Redwood, al norte de San Francisco: destacan los árboles llamados Hyperion –115 metros– y Stratosphere Giant –113 metros–.
 
Las condiciones de la zona
–el aire fresco oceánico que mantiene una niebla y humedad constantes–
les proporcionan el ambiente idóneo para crecer. Por otro lado, su gruesa corteza, rica en taninos, protege a estos árboles del fuego y los insectos, pero lo que más contribuye a que resistan de pie tanto tiempo es su estructura: a partir de la raíz crecen troncos independientes que se mantienen pegados entre sí; si uno resulta dañado, los demás se siguen desarrollando y aportan savia al tronco que la necesita.