Japón, al igual que España, es un país donde la población es cada vez más anciana y ante esa situación están buscando soluciones para que los mayores y discapacitados del futuro tengan una vida más digna de forma autónoma.
Cosas triviales como lavarse, cocinar o vestirse pueden ser muy complicadas cuando tenemos menos movilidad o alguna discapacidad, por lo que a diferencia de la solución española de buscar asistentas humanas sin papeles, los japoneses optan por los robots.
Sí, puede que el que los robots no escuchen Reggeaton sea un motivo más que justificado para seguir el ejemplo japonés, pero también es verdad que a pesar de ello un robot no es lo mismo que una persona, no da calor humano y va a pasar todavía mucho tiempo hasta que sean viables.
Pero de momento, el sistema que viste a la gente combinando los brazos WAM con el sistema de inteligencia artificial avanzada del Instituto de Ciencia y Tecnología de Nara es todo un éxito.
Aprender a vestir a alguien totalmente desconocido con una prenda que no haya “visto” nunca le cuesta sólo unos pocos minutos gracias a su sistema de refuerzo del aprendizaje.
De esta manera se ajusta y adapta a todo tipo de personas y ropa sin problemas, ayudándote a ponerte todo tipo de cosas.
Ante esto yo creo que deberían poner uno en todos los sitios de buceo, ya que a veces embutirte en el traje de neopreno es una tarea épica. Pero, soluciones a problemas frívolos y absurdos aparte, es un paso más para mejorar la vida de mucha gente.
Eso sí, viniendo de Japón me alarma un poco el llegar a pensar para que otros oscuros propósitos podrán llegar a usar estos brazos y seguro que ya están haciendo otra versión recubierta de látex, con boca, lengua y hasta peluca…
Cosas triviales como lavarse, cocinar o vestirse pueden ser muy complicadas cuando tenemos menos movilidad o alguna discapacidad, por lo que a diferencia de la solución española de buscar asistentas humanas sin papeles, los japoneses optan por los robots.
Sí, puede que el que los robots no escuchen Reggeaton sea un motivo más que justificado para seguir el ejemplo japonés, pero también es verdad que a pesar de ello un robot no es lo mismo que una persona, no da calor humano y va a pasar todavía mucho tiempo hasta que sean viables.
Pero de momento, el sistema que viste a la gente combinando los brazos WAM con el sistema de inteligencia artificial avanzada del Instituto de Ciencia y Tecnología de Nara es todo un éxito.
Aprender a vestir a alguien totalmente desconocido con una prenda que no haya “visto” nunca le cuesta sólo unos pocos minutos gracias a su sistema de refuerzo del aprendizaje.
De esta manera se ajusta y adapta a todo tipo de personas y ropa sin problemas, ayudándote a ponerte todo tipo de cosas.
Ante esto yo creo que deberían poner uno en todos los sitios de buceo, ya que a veces embutirte en el traje de neopreno es una tarea épica. Pero, soluciones a problemas frívolos y absurdos aparte, es un paso más para mejorar la vida de mucha gente.
Eso sí, viniendo de Japón me alarma un poco el llegar a pensar para que otros oscuros propósitos podrán llegar a usar estos brazos y seguro que ya están haciendo otra versión recubierta de látex, con boca, lengua y hasta peluca…
