Olvídate del chorro único de la ducha, y no estamos hablando de cuando la cal se acomoda en la salida del agua y aquello parece un diluvio incontrolable. Media docena de surtidores independientes, orientables a tu gusto y cada uno de ellos proporcionando su colección de chorritos de agua, es lo que puedes tener en tu ducha si no te da miedo entrar y pensar que hay un pulpo o una araña o un bicho como los de Matrix colgando en el techo y esperando para hacerte pupita.
Los centinelas de matrix o la mitológica Medusa… o sencillamente Scu-Head, un curioso accesorio de ducha que proporciona una ídem diferente.
Elaborado por la casa Vado se puede instalar en cualquier acometida normal de ducha pero gracias a sus tentáculos articulados de cuyos extremos salen chorros de agua, la sensación difiere de la habitual dado que recibes los mismos desde diferentes posiciones que puedes variar a tu antojo.
Una buena idea puede ser montar un segundo Scu-Head algo más bajo para acceder con esos chorritos de agua a rincones más recónditos de tu anatomía y descubrir una nueva senda de los placeres de la ducha. Eso sí, ten preparado un buen presupuesto porque si incluir la instalación de tuberías este invento cuesta casi 1.000 €.
Ya tiene que dar gustico, ya.
Los centinelas de matrix o la mitológica Medusa… o sencillamente Scu-Head, un curioso accesorio de ducha que proporciona una ídem diferente.
Elaborado por la casa Vado se puede instalar en cualquier acometida normal de ducha pero gracias a sus tentáculos articulados de cuyos extremos salen chorros de agua, la sensación difiere de la habitual dado que recibes los mismos desde diferentes posiciones que puedes variar a tu antojo.
Una buena idea puede ser montar un segundo Scu-Head algo más bajo para acceder con esos chorritos de agua a rincones más recónditos de tu anatomía y descubrir una nueva senda de los placeres de la ducha. Eso sí, ten preparado un buen presupuesto porque si incluir la instalación de tuberías este invento cuesta casi 1.000 €.
Ya tiene que dar gustico, ya.
