¿Cuántas veces has visto con frustación como, mientras trabajas, el boli o lápiz se te escapa cuando lo intentas coger de la mesa y termina rodando al suelo? Vale, puede que no pase continuamente, pero cuando lo hace molesta bastante. Lo que no sabemos es si eso será lo bastante como para que te plantees comprarte el boli Slända, diseñado de tal manera que siempre se mantiene erecto en tu mesa.
Según sus creadores, Gustav Widström y Marcus Heneen, agarrar cosas erectas es mucho más fácil, además de que imposibilita el que vaya a rodar fuera de la mesa.
Para conseguirlo su “cabeza” está sobredimensionada para cambiar el centro de gravedad y además dar un apoyo que permite que se mantenga alzado sin que la punta toque la superficie.
Además, según comentan en la web del boli, la forma no sólo consigue que esté alzado, sino que también facilita la escritura y lo hace más manejable, aunque yo no lo tengo muy claro.
Chulear a la gravedad con este boli cabezón te costará 30 dólares e innumerables bromas de tus compañeros de oficina o clase sobre la relación que tienes con él para conseguir que siempre se alegre de verte...
Según sus creadores, Gustav Widström y Marcus Heneen, agarrar cosas erectas es mucho más fácil, además de que imposibilita el que vaya a rodar fuera de la mesa.
Para conseguirlo su “cabeza” está sobredimensionada para cambiar el centro de gravedad y además dar un apoyo que permite que se mantenga alzado sin que la punta toque la superficie.
Además, según comentan en la web del boli, la forma no sólo consigue que esté alzado, sino que también facilita la escritura y lo hace más manejable, aunque yo no lo tengo muy claro.
Chulear a la gravedad con este boli cabezón te costará 30 dólares e innumerables bromas de tus compañeros de oficina o clase sobre la relación que tienes con él para conseguir que siempre se alegre de verte...
