jueves, 6 de junio de 2013

Los monos no saben perder

Científicos estadounidenses han descubierto que los chimpancés y bonobos reaccionan emocionalmente cuando toman decisiones equivocadas, de un modo muy similar a los seres humanos.
Un estudio coordinado por Brian Hare, de la Universidad de Duke (EE UU), indica que los simios muestran muevas de disgustos y tienen fuertes pataletas y rabietas cuando, después de asumir un riesgo, fracasan.
Para demostrarlo, los primatólogos diseñaron dos juegos de toma de decisiones para monos que viven en santuarios africanos: uno para poner a prueba su paciencia y el otro para evaluar la toma de riesgos. Así detectaron que las dos especies exhibían respuestas emocionales ante el resultado de sus elecciones, si bien los chimpancés eran más pacientes y más proclives a asumir riesgos. Cuando la opción escogida no daba el resultado que esperaban, se producía una respuesta emocional negativa, lanzando gritos similares a lamentos y "pucheros", a la vez que se rascaban compulsivamente y daban golpes en el suelo similares a las pataletas de un niño que no obtiene lo que desea.
En un artículo que publica PLOS ONE, los investigadores concluyen que, como los humanos, otros los simios exhiben respuestas emocionales tras conocer los resultados de su la toma de decisiones.
"Psicólogos y economistas han detectado que las emociones juegan un papel crítico dando forma al modo en que los seres humanos tomamos decisiones complejas, como si ahorramos una suma de dinero o la invertimos",
explica Alexandra Rosati, coautora del estudio, que asegura que los sentimientos de frustración y lamentación también aparecen en primates cuando las decisiones que han tomado afectan a su principal recurso, que en su caso no es el dinero sino la comida