martes, 15 de octubre de 2013

Mientras masticas, la publicidad no te afecta

Un grupo de investigadores de la Universidad de Colonia, en Alemania, ha llegado a la conclusión de que mientras masticamos somos inmunes a la publicidad. Los científicos lo achacan a que, cuando descubrimos una marca o producto por primera vez, los labios y la lengua simulan automáticamente la pronunciación del nombre sin que nos demos cuenta.
Y lo mismo sucede cuando nos volvemos a reencontrar con la marca: la boca practica su pronunciación. Pero si mascamos un chicle, masticamos comida o charlamos mientras vemos un anuncio, este fenómeno no se produce, y el cerebro no retiene el nombre de la marca.


Los resultados se basan en estudios realizados en salas de cine comparando los efectos de comer palomitas durante los anuncios y los efectos de no masticar ningún alimento. Según concluyen los autores del trabajo en Journal of Consumer Psycology, durante los experimentos la publicidad no surtió ningún efecto en aquellos que masticaban a la vez que los anuncios se proyectaban en la gran pantalla.