miércoles, 12 de mayo de 2010

Hydrogenase, la eco-estructura flotante para el 2030


Lo que ves en la imagen no se trata de un nuevo rascacielos (aunque está cerca), ni un misil ecológico (si es que pudiera existir algo así). Se trata de Hydrogenase, un nuevo diseño de dirigible futurista, el cual se usaría como transporte, vivienda, laboratorio de investigación… lo que haga falta oiga. Así lo ha concebido su diseñador, el arquitecto belga Vincent Callebaut, quien cree que podría ser una realidad en el 2030.
La estructura obtendría la energía por medio de bio-hidrógeno, obtenido a partir de granjas de algas (las cuales están en el mar, en la base que podéis apreciar), una serie de células fotovoltaicas inflables y helices generadoras de energía que también servirían, en un momento dado, de turbinas. Además, cuando está en su base, 32 hidro-turbinas se encargarían de obtener energía de las corrientes marinas.
De unos 400 metros de altura, esta especie de avión vertical (o rascacielos flotante) tendría 4 zonas principales: viviendas, oficinas, laboratorio de investigación y entretenimiento. Cada espacio habitable estaría separado del siguiente por un “colchón” de bio-hidrógeno, con células fotovoltaicas. También contendría una serie de globos de helio en su interior. Toda la estructura estaría revestida de un cristal especial, resistente a fuego y a agua. Aunque la estructura es más pesada que un globo aerostático de su tamaño, su forma le permite alcanzar mayor velocidad y capacidad de carga.
Sus 20 turbinas le permitirían alcanzar una altitud de 2 km y una velocidad de 177 km/h. Aunque es 7 veces más lento que un avión, tendría una capacidad de carga de 200toneladas.
Quién sabe, quizá el Hydrogenase sea el primer paso hacia la resurrección de los dirigibles, los cuales dejaron de popularizarse tras el incendio del Hidenburg