Cuando uno imagina un portátil en la cocina lo hace pensando en su uso como libro de cocina en el que almacenar o a través del que consultar en Internet recetas paso a paso con profusión de ilustraciones o incluso vídeos que nos orienten sobre como hacer crème brûlée o poner claras a punto de nieve.
Pero hay quien pretende emplear el portátil como herramienta en sí misma, como si se tratase de un utensilio más, y para algunos fines nada como una herramienta afilada a la hora de cortar, laminar o desmenuzar carne. Es el momento de coger amenazadoramente el MacBook Air.
Sakaiehita es alguien que ha sabido ver el potencial armamentístico del portátil ultrafino de Apple y ha sentido la necesidad de sacarle partido en la cocina.
Champiñones laminados, manzanas partidas, repollos troceados, zanahorias peladas… incluso se atreve con trabajos de precisión sobre una gamba. No hay rival para un MacBook Air bien afilado en las manos de Sakaiehita, casi parece que sería capaz de ganarle a los célebres cuchillos Ginsu..
