Las superficies para colocar un sistema táctil estaban bastante limitadas hasta ahora, pero gracias a una nueva tecnología desarrollada por Visual Planet, esto podría cambiar radicalmente y permitir que prácticamente cualquier superficie que queramos pueda ser táctil, haciendo posible además superficies enormes hasta ahora impensables.
La tecnología se basa en una lámina táctil construida a base de nanocables transparentes que son capaces de detectar prácticamente cualquier tipo de presión, desde las más fuertes hasta incluso el viento.
Esto significa que ya no es necesaria una superficie conductiva y que un mundo enorme de posibilidades se abre ante nosotros. Su uso se estima sobre todo para exposiciones, museos, convenciones, paneles informativos y cualquier sitio que necesite algún tipo de interacción en grandes pantallas que tengan que ser resistentes.
Veremos si tiene éxito y nuestro alrededor se tactiliza convirtiendo el mundo en una especie de tablet continuo y sin fin...
