jueves, 13 de septiembre de 2012

Convierten semiconductores en superconductores usando celo

El Equipo A nos demostró que gracias a la cinta adhesiva todo es posible, arreglar motores, convertir carritos de golf en tanques, amordazar y atar a Mr. T. Estos fantásticos usos ilimitados de la cinta, han hecho pensar que era el material definitivo, de hecho hasta los Cazadores de Mitos nos demostraron como sobrevivir en una isla desierta sólo con ella. Pero ahora hay que dejarle paso a su pariente discriminado, el paliducho que se pasa todo el día en la oficina, el celo, que ha permitido “convertir” semiconductores en superconductores.
Podría parecer una chapuza cutre, o una escena de MacGyver, pero justamente el celo ha sido lo que han necesitado un equipo internacional de investigadores, liderados por físicos de la Universidad de Toronto, para inducir superconductividad de alta temperatura en un semiconductor.
Los superconductores de alta temperatura son materiales que permiten conducir electricidad sin calentarse y perder energía a la temperatura del nitrógeno líquido, es decir con alta eficiencia a bajas temperaturas.
El problema es que sólo los cupratos tienen estas propiedades y hasta ahora era imposible incorporarlos a los semiconductores. La solución, usar celo y placas de vidrio para colocar superconductores en un tipo especial de semiconductor llamado aislante topológico. Problema resuelto.
Ya sólo falta que alguien se de cuenta de que lo único que hace falta para controlar y llevar a cabo la fusión fría es un chicle y un clip doblado.