jueves, 27 de febrero de 2014

Rolls Royce trabaja en barcos de carga completamente autónomos

La próxima profesión en peligro de extinción por el auge de los robots podría ser la de marino mercante. Todo indica que el futuro que viene nos traerá una nueva estirpe de cargueros que no llevarán ni un solo tripulante a bordo. Todos los sistemas de navegación serán automáticos, como si fueran gigantescos drones marinos.
Una de las empresas que más ha avanzado en estos nuevos transportes marítimos es Rolls Royce a través de Blue Ocean, su departamento de investigación en materia de barcos. Blue Ocean está diseñando barcos en los que no hay capitán, ni ingenieros ni maquinistas, ni cocinero. Tan solo un ordenador de a bordo que toma las correspondientes decisiones de rumbo en base a cámaras y dispositivos de navegación y comunicaciones.

La razón para querer eliminar a la tripulación no es otra que el coste. Se calcula que el coste diario de mantener la tripulación estándar de un carguero es de unos 3.300 dólares. Visto desde la perspectiva de gastos, la tripulación supone el 44% del total de gasto de una operación de transporte. Eso sin contar que, si eliminas a la tripulación, eliminas los camarotes y las zonas comunes, y puedes diseñar un barco con mucho más espacio para carga.

A pesar de lo que diseñe Blue Ocean, aún habrá que esperar unos años para ver estos barcos-drone surcando los océanos. Para empezar, la legislación internacional no contempla la posibilidad de un barco sin tripulación. Las compañías de transporte marítimo tampoco ven con muy buenos ojos ese futuro. Apostaríamos a que ambas cosas se curarán con el tiempo y un poco de tecnología.