Un reciente estudio
publicado en la revista Journal of the American
Dietetic Association revela
que quienes hacen dieta y toman un snack a media
mañana pierden solo un 7% de su peso corporal, mientras que quienes toman un desayuno completo y
esperan hasta el almuerzo para volver a comer pierden un 11% de su peso
corporal.
N obstante, aunque tomar un aperitivo cerca de una comida
principal puede ser perjudicial para la pérdida de peso, distanciar demasiado
las comidas también puede perjudicarnos.
“No deben transcurrir más de cinco
horas -como máximo- entre comidas”,
advierte Anne McTiernan, investigadora del
Centro de Investigación del Cáncer Fred Hutchinson (EE UU) y coautora del
estudio.
“Comer algo a media mañana puede formar parte de la estrategia de
pérdida de peso si realmente lo hacemos porque tenemos hambre, y de hecho nos
hará elegir mejor el contenido del almuerzo”,
añade. Por otro lado, quienes pican algo a media tarde suelen tomar más
frutas y verduras que aquellos que no
toman nada entre el almuerzo y la cena.