lunes, 18 de junio de 2012

Nuevo avance hacia la consecución de energía nuclear de fusión

Ingenieros de la University of Tennessee, Knoxville, en Estados Unidos, han desarrollado una nueva tecnología de gran importancia para la futura puesta en marcha de un reactor experimental, que pueda demostrar la viabilidad de la energía de fusión para su empleo alimentando la red eléctrica. La fusión nuclear lograría obtener más energía que la fisión nuclear empleada en la actualidad, pero con muchos menos riesgos asociados.
Los profesores David Irick, Madhu Madhukar y Masood Parang de la University of Tennessee, Knoxville, especializados respectivamente en ingeniería mecánica, aeroespacial y biomédica, han concretado un importante avance tecnológico que incrementaría las posibilidades de desarrollar un reactor experimental de fusión en un futuro cercano.

Este proyecto forma parte de una iniciativa denominada ITER, que involucra a los Estados Unidos, a la Unión Europea y a otros cinco países. Los resultados de la investigación se han difundido mediante una nota de prensa de la University of Tennessee, Knoxville, y también se desarrollaron en un reciente artículo publicado en el medio especializado Science Daily.
Los ingenieros han logrado aislar y estabilizar el solenoide central, que vendría a ser la columna vertebral del reactor.

Detalles de la innovación tecnológica

El reactor emplea campos magnéticos para proteger el plasma, un gas caliente y eléctricamente cargado que sirve como combustible. El solenoide central, en tanto, consta de seis bobinas gigantes apiladas una encima de la otra, desempeñando un papel primordial al encender y dirigir la corriente de plasma.
La clave para optimizar la tecnología fue encontrar el material adecuado para aislar el solenoide central. La elección recayó en una combinación de fibra de vidrio y una mezcla química de epoxi que se vuelve líquida a temperaturas elevadas y se endurece en otras condiciones.
Vale destacar que la mezcla especial proporciona aislamiento eléctrico y resistencia a la estructura, siendo vital el proceso correcto de inserción de este material en todos los espacios necesarios dentro del solenoide central. El equilibrio a lograr no es sencillo, ya que mientras más aumente la temperatura menor será la viscosidad de la mezcla, pero al mismo tiempo una temperatura extrema reducirá la vida útil de la resina epoxi.
El reactor desarrollado en el proyecto ITER, diseñado para demostrar la viabilidad científica y tecnológica de la energía de fusión, será el más grande en su tipo a nivel mundial. Se necesitaron dos años para desarrollar la tecnología, y los costes de construcción han sido compartidos entre las naciones asociadas.