domingo, 29 de mayo de 2011

Los escombros del tsunami de Japón acabarán en Alaska

El tsunami que el pasado 11 de marzo devastó la costa de Japón se llevó por delante casas, mobiliario urbano, vehículos y demás elementos, que arrastrados por la fuerza del agua acabaron en el interior del mar sin orden ni concierto y sin que, aparentemente, nadie haya vuelto a preocuparse de su destino final.

Dos científicos del Centro Internacional de Investigación del Pacífico, adscrito a la Universidad de Hawái en Manoa han calculado a dónde pueden dirigirse estos escombros, y las conclusiones son realmente sorprendentes.
Según Nikolai Maximenko y Jan Hafner, los restos se ha dirigido primero hacia el este, alejándose de esta manera de la costa japonesa. Dentro de un año, según sus predicciones, algunas costas de Hawai recibirán parte de estos restos y, un año después, el resto de las islas del archipiélago.
Tres años después del terremoto y el tsunami, la "caravana" de escombros alcanzará la costa oeste de Norteamérica, arrojando escombros en las playas californianas, en las de la Columbia Británica (Canadá), en Alaska, y en Baja California.
Una buena parte de estos restos, sin embargo, tiene como destino inevitable la conocida como Gran Mancha de Basura del Pacífico Norte, donde las corrientes marinas depositan continuamente restos de cualquier punto del océano.